En el ámbito laboral siempre habrá desafíos y estereotipos por afrontar. Como parte de esta competitividad, las mujeres actualmente juegan un papel importante en las empresas. Sin embargo, enfrentan diariamente grandes retos profesionales, incluso cuando ya tienen cierta posición o estabilidad laboral.

Desafortunadamente, hay muchas empresas en las cuales la equidad de género no es un asunto relevante. Por ende, las creencias en torno a este tema están muy estigmatizadas y las mujeres no siempre obtienen las mismas condiciones y oportunidades laborales.

Hay países en donde este problema no es un factor que imposibilite el trabajo de la mujer. En México las circunstancias son distintas y a diario se presentan retos profesionales que obstaculizan el ascenso de la mujer en el mundo empresarial.

Principales retos profesionales a los que se enfrentan las mujeres

1. Brecha salarial

Es ya muy sabido que las empresas generalmente pagan menos a las mujeres, incluso aunque desempeñen el mismo trabajo que un hombre. Esto es aún más claro cuando la dirección de un área corre a cargo de una mujer, pues el salario puede ser la mitad de lo que recibiría un hombre en el mismo cargo. Aunque año con año esta brecha disminuye, sí es importante resaltar este problema para que haya un principio de paridad que se respete en las empresas.

2. Balance laboral-familiar-personal

Este es un problema que aplica tanto a hombres como mujeres. No obstante, puede llegar a ser una preocupación más grande para las mujeres que tienen hijos y deben de cuidarlos. Por lo general, las empresas no brindan facilidades ante estas circunstancias familiares, representando una gran preocupación. Si se toman en cuenta los diferentes ámbitos que hay que cuidar (familia, trabajo, personal, físico), tomarse un tiempo para sí misma resulta casi imposible.

3. Acoso

Según una encuesta realizada por Adecco (2016), 1 de cada 3 mujeres declaró haber sido víctima de abuso o acoso en el ámbito laboral. Pueden llegar a darse más casos, pero, lamentablemente, no siempre se denuncian estos actos. Es un reto profesional, ya que el acoso les impide desarrollarse plenamente en sus funciones, impidiendo el crecimiento a mediano y largo plazo.

4. Rechazo laboral

Esto es lo que se conoce como segregación horizontal. Las mujeres son contratadas en puestos que tradicionalmente han sido calificados como “femeninos. Hay una división laboral interna por sectores en donde hay preferencia para hombres o para mujeres. Es decir, hay ocupaciones en donde el trabajo “masculino” es mejor valorado que el de la mujer.

5. Discriminación de género

Los estereotipos en nuestra sociedad están muy arraigados históricamente y esto ha llevado a la discriminación. Seguramente has escuchado el típico “tú no porque eres mujer” o “las mujeres no pueden hacer esto”. Precisamente esto ha presentado todavía más retos profesionales para las mujeres en la búsqueda por derribar estos pensamientos. Aquí se engloba prácticamente todo lo mencionado anteriormente, pues son formas de discriminación a la mujer.

¿Cómo afrontar estos retos profesionales?

• Explota al máximo tus capacidades y habilidades

Una consecuencia de los retos profesionales anteriormente mencionados es que puede haber un punto en el que dejes de expresarte. ¡No lo hagas! Siempre habrá obstáculos que te impidan avanzar, pero ante todo debes de ser segura de ti misma y de tus conocimientos. Atrévete, toma riesgos y demuestra tus habilidades, pues eso te traerá nuevas oportunidades.

• Organízate

Hay ocasiones en la que te puedes sentir estancada y no saber hacia dónde ir. Esto puede ser porque no sabes organizarte y no pones prioridades en los diferentes ámbitos de tu vida. Por eso te recomendamos tener una agenda o cualquier herramienta que te permita definir tiempos, días y tareas a realizar. Desde ver a tu familia, hacer ejercicio, tomar un curso, aprender un idioma o hacer algo del trabajo, es importante que aprendas a jerarquizar cada aspecto. Así tendrás más orden y podrás encontrar el balance entre el trabajo y tu vida personal.

• Prepárate y aprende

Lo más básico e importante será siempre estar preparada y seguir aprendiendo. Si en algún punto dejas de interesarte por ir más allá de lo que sabes, claro que te estancarás y ese será todavía un reto profesional mayor. Toma cursos, lee, investiga, analiza, interésate en diferentes ámbitos y no te conformes con lo que ya tienes.

• Defiéndete

Aunque la discriminación hacia la mujer podría ser visto, desafortunadamente, como algo “normal”, no lo es. Cuando sientas que están atentando en contra de tus derechos, busca ayuda y levanta la voz. No te quedes callada y no tengas miedo de las consecuencias. Es un paso más que contribuirá al respeto de los derechos laborales y a una mayor equidad laboral entre hombres y mujeres.

Afortunadamente, la escena actual muestra un avance en cuanto a las oportunidades laborales para las mujeres. Recuerda, esto no se trata de si las mujeres merecen más que los hombres. Simplemente es exigir las mismas posibilidades de crecer en el ámbito profesional y, al final del día, desarrollarte plenamente y contribuir al progreso de la empresa.

Y claro, hay hombres que enfrentan los mismos retos profesionales. Por eso es necesario tomar acción, ayudarse los unos a los otros y así buscar que cualquier persona, hombre o mujer, tenga acceso a las mismas oportunidades profesionales.